Los Campeones de la Luz buscan crear un imperio de paz y prosperidad, respetando a las demás razas, y gobernar con sabiduría al amparo de los dioses de la luz. Sus paladines son tropas temibles en batalla y sus sacerdotes protegen a los que arriesgan su vida por tan noble causa.

Los Señores de la Magia, fieles discípulos del Padre de la Magia, buscan ayudar a su gran maestro en la labor de unificar de nuevo las once partes del mundo. Su conocimiento mágico no tiene rival, y saben usarlo como nadie en la batalla invocando colosos y rompiendo las estrategias enemigas.

Los Caballeros Oscuros han aprendido que la vida consiste en conquistar o ser conquistado, y ellos prefieren estar en el bando ganador. Sus oscuros dioses les proporcionan grandes poderes y sus tropas siguen luchando en la batalla incluso después de muertas. Liberan terribles maldiciones sobre sus enemigos y no conocen la palabra piedad.

No todos los héroes combaten por grandes ideales. Los Señores de la Guerra solo buscan hacerse un lugar en el mundo al que poder llamar hogar, libres de la influencia de los dioses y de todos aquellos que intentan imponerles su visión del mundo. Saben moverse como nadie en el campo de batalla y entre sus tropas se encuentran todos aquellos que solo desean ser libres y que han renunciado a sus antiguas facciones.